¿Has notado que el nivel de agua de tu piscina baja más de lo normal? Antes de entrar en pánico, es importante saber si realmente tienes una fuga o si simplemente se trata de evaporación natural. Afortunadamente, existen varias pruebas caseras que puedes hacer tú mismo para confirmar si tu piscina pierde agua. En No Más Fugas, especialistas en detección y reparación de fugas de agua en piscinas, te explicamos paso a paso cómo realizar estas comprobaciones de forma sencilla y eficaz.
Diferenciar evaporación de fuga
Durante los meses calurosos, es normal que el agua de la piscina baje unos milímetros al día por la evaporación. Sin embargo, cuando la pérdida es constante y mayor de lo esperado, es posible que haya una fuga. Antes de hacer cualquier prueba, observa durante un par de días si la bajada es proporcional a la temperatura y el uso de la piscina.
Si el nivel baja más de 2 cm diarios sin que nadie la use, probablemente hay un problema que requiere atención.
La prueba del cubo
Una de las pruebas caseras más efectivas es la prueba del cubo. Solo necesitas un cubo de plástico y un poco de paciencia.
- Llena un cubo con agua hasta el mismo nivel que la piscina.
- Coloca el cubo dentro de la piscina, en una escalera o en el primer peldaño, para que esté en contacto con el agua.
- Marca el nivel de agua tanto dentro como fuera del cubo con cinta adhesiva o un rotulador.
- Deja la piscina sin usar durante 24 a 48 horas.
Si después de ese tiempo el nivel del agua fuera del cubo ha bajado más que el interior, es una clara señal de fuga. Si ambos niveles bajan igual, probablemente es solo evaporación.
En No Más Fugas utilizamos esta prueba como primer paso antes de realizar una detección más precisa con tecnología especializada.

Revisión de accesorios y juntas
Otra forma de detectar fugas es revisar las juntas de los skimmers, luces y boquillas de retorno. Muchas veces, pequeñas fisuras o sellados desgastados pueden ser la causa de la pérdida de agua. Para comprobarlo:
- Apaga la bomba y observa si hay burbujas o filtraciones alrededor de los accesorios.
- Inspecciona visualmente si hay humedad en las paredes o zonas cercanas a la piscina.
- Si notas manchas húmedas persistentes, es probable que el agua esté escapando por ahí.
Prueba del nivel de agua con la bomba apagada
Si sospechas que la fuga está en las tuberías, una prueba sencilla es dejar la bomba apagada durante 24 horas y observar si el nivel baja. Si la pérdida disminuye al no circular el agua, lo más probable es que la fuga esté en la instalación hidráulica.
En cambio, si el agua sigue bajando al mismo ritmo, puede tratarse de una fisura en el vaso de la piscina o en alguna junta estructural.
Inspección visual de grietas
Aunque no siempre es evidente, es buena idea revisar las paredes y el fondo de la piscina en busca de grietas o pequeñas fisuras. Si notas alguna, puedes hacer una prueba casera aplicando un poco de colorante alimentario cerca de la zona sospechosa. Si el color es absorbido hacia la grieta, es una señal de fuga.

Cuándo llamar a profesionales
Si después de estas pruebas confirmas que hay una fuga, el siguiente paso es contactar a especialistas. Localizar con precisión el punto exacto y repararlo de forma definitiva requiere tecnología y experiencia profesional.
En No Más Fugas contamos con equipos de detección avanzados que nos permiten localizar fugas sin vaciar la piscina ni hacer obras innecesarias. Nuestro objetivo es ofrecer una reparación rápida, eficaz y duradera para que puedas volver a disfrutar de tu piscina sin preocupaciones.
¿Sospechas que tu piscina pierde agua? Haz estas pruebas caseras para confirmarlo y, si detectas una fuga, contacta con No Más Fugas. Nuestro equipo de expertos en detección y reparación de fugas de agua en piscinas te ayudará a solucionar el problema de manera definitiva.




